lunes, 16 de marzo de 2009

Palabras de nuestro Obispo, D. José Manuel

Mucho ha escrito D. José Manuel sobre las vocaciones. De hecho es un tema prioritario para él. La necesidad de jóvenes que respondan positivamente a la llamada que el Señor está sembrando en sus corazones, para seguirle desde el ministerio sacerdotal o la vida religiosa. Os ofrecemos dos cosas, de las muchas que podeis encontrar en http://www.diocesisdeteruel.org/pvocacional.html, que es la dirección de la pastoral vocacional en la web de nuestra diocesis. Esperemos que os ayuden.




¿Señor, qué quieres que haga?



Seguro que esta pregunta te la habrás planteado muchas veces en tu vida, es lo normal de un cristiano que se siente seducido por el plan de Dios, por la misericordia entrañable de Nuestro Señor, que no tiene descanso en el perdón. La limpia alegría que nos regala Cristo Resucitado y la belleza de la fe, nos apremian a seguirle.
En este tiempo es importante la pregunta, pero es más necesaria la respuesta, porque Dios nos pide respuesta. Nos ha sacado a la calle y nos ha hecho ver los caminos sin rumbo por los que andan nuestros contemporáneos; nos ha hecho descubrir las tinieblas que rodean a nuestros vecinos y el sinsentido de muchas vidas atormentadas… No te fuerza, pero descubres que te llama, porque te necesita para ser portador de agua para los sedientos, de luz para los que están en la noche, brújula para los desorientados, esperanza para los abatidos y desconsolados, alegría para los tristes…
La propuesta es maravillosa, porque el que llama es maravilloso y no es conveniente hacerle esperar, porque hay mucho trabajo por delante, muchas vidas que salvar. Seguir a Jesús es lo más extraordinario que le puede pasar a cualquier ser humano, si, decididamente sí. Las razones no hay que buscarlas en que seremos más felices, nos lo pasaremos bien… no, las razones van por otro camino: saber de quién te has fiado y que Él da sentido pleno a tu vida. Pero, también, porque hoy es necesaria la figura de los profetas, elegidos para ser testigos de la Luz, de la Verdad y de la Vida; predicar el Reino de Dios, resucitar a los muertos, ayudar a caminar a los que se sienten sin esperanza, liberar del peso de los pecados, abrir los ojos a los ciegos, sacar a presos de sus propias cárceles, orientar a la casa del Padre a los hijos pródigos, denunciar la oscuridad y proclamar la verdad y la justicia… con la sola arma del amor. Es una aventura para decididos, los pusilánimes, miedosos, timoratos, temerosos, asustadizos… abstenerse de llamar a esta puerta.
Anímate a responder, a decir sí a Dios, fíate de quien se fía de ti, que Él arriesga más. El Señor no defrauda a nadie nunca, pero debes ser tu, el que des el paso, el que libremente te insertas en esta aventura de seguir a Cristo. Te espero y cuento contigo para trabajar en esta Iglesia de Teruel y de Albarracín. Que Dios te bendiga,
+ José Manuel Lorca Planes
Obispo de Teruel y de Albarracín








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